“Cuida que tu corazón no albergue intenciones malévolas”(Deuteronomio 15:9). Por eso Hilel estableció el prusbul pues quien escribe el documento sus deudas no caducan. (Jok le israel perasha Matot-Masé).
Pienso que son muy importantes las intenciones en cuanto hacemos y debemos de ser conscientes del alcance de nuestros acuerdos. No es casualidad que se hable de ello en esta perasha que menciona la importancia de alejarnos del tronco de árbol inerte y darle vida con nuestros actos, de cumplir nuestras promesas y concientizar la fuerza de nuestras palabras e intenciones. Es central poner claridad y corazón en todos nuestros acuerdos, saber que no caducan y cumplir nuestras misiones en la tierra en amor y desde la abundancia.
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