Polvo de estrellas

 En Dios y la ontoteología Hedeggeriana nos dice Levinas que hay un problema de esa época de la filosofía en el no dicho y en el no pensado de esa época. Para Levinas la posibilidad es de renovar las respuestas a lo no dicho ni pensado de manera más madura. En esa filosofía el ser es teología y no se acepta la diferencia.

Pero nos dice Levinas que la negación guarda el polvo de la tierra, así el ser y la nada están relacionados, es el otro irreductible al Mismo. ¡Esa relación es la ética! El ser confirma al pensamiento pero el pensamiento piensa el sentido. Contra Dios y la ontoteología podemos encontrar una nueva forma, un nuevo sentido y relación ética que podemos proponer.

Es la búsqueda en el otro, es ese extra que deja el ser a la supuesta nada que habitó, ese polvo que nos eleva en el olor sensorial de lo que fue y despierta lo que podemos ser desde el misterio del otro y para el otro en apertura y escucha, promesa de redención, rostro infinito, misión de vida. Podemos vivir el instante para encontrar ese extra en ética y desde la apertura a la diferencia, en nuevas palabras que dancen con ese polvo remanente para crear en asombro radical un nuevo horizonte de verdad.

Polvo de estrellas para dar desde el misterio de otro