Vivimos en medios precisos, en el aire y no en el agua. Recordamos nuestra relación con lo que es respirable y lo que es tóxico, la persona tóxica es negativa para nosotros. Vivir en un medio es estar en un conjunto estructurado, imagen espacial y geométrica, en el medio de este medio que construimos somos un conjunto de relaciones de sus habitantes. Al centro de este mundo de relaciones estamos en el medio de todos los medios y no es vacío, afortunadamente genera y multiplica pero debemos cuidar nuestro medio y nuestros medios y elevarlos con todas nuestras fuerzas para alejar toda toxicidad de nuestro medio, de nuestros medios, purificarlos. Se trata de purificar y sanar todos nuestros lazos y entretejidos. Parte de la contaminación de nuestros medios no sólo es material, es espiritual, es del lenguaje, mediante las malas palabras y las palabras que corrompen, los actos que corrompen. Tratemos pues de sanar todos nuestros medios dentro y fuera, en lo material y en lo espiritual.
Respirar en un medio puro para dar amor y compartir
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