En cada etapa nos vamos desarrollando de manera diferente y en la adolescencia por ejemplo, se dan muchas pulsaciones creativas que nos asaltan y debemos encauzar. Todo humano se posiciona en la existencia de maneras diferentes y en un continuo del nacimiento a la muerte nos vamos situando en esta línea. Hay puertas y marcos en momentos importantes de resurrección y nos vamos posicionando en nuevos comienzos, en autonomías que aumentan o disminuyen alrededor de diferentes eventos y a lo largo de la vida. ¿Cómo vivimos nuestra vida y nos la apropiamos? Es nuestra vida en intercambios e identidades en un mundo de relaciones fluctuante. Temas importantes alrededor son los de la libertad y ciertas pancartas de vida que nos retan a cada paso, exigiéndonos una postura que nos pula y precise quiénes somos. Los eventos dan ritmo a nuestro tiempo de vida en la tierra y nuestra posición frente a ellos, también nuestras emociones. La cólera nos moldea cuando pelea por la justicia y debemos tratar de instrumentalizarla políticamente con actos que nos lleven a mejorar el planeta y vivir nuestras emociones de manera sana en sus relaciones. Creo que en nuestra línea de vida y en sus etapas debemos situarnos, definirnos y darle lugar a las emociones, sus relaciones y temas de vida para mejorar el mundo y la ayuda a todo otro en todo momento.
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