La filosofía reflexiva lleva a posibilidades en mí, puedo ser yo en ciencia abstracta también. El mundo responde a las leyes matemáticas y somos capables de actos libres y podemos razonar. En esta racionalidad regresamos a nuestros actos fundacionales desde la filosofía. Fue criticada por Sartre y Marleau ponty que buscaban la pre-reflexión, buscando el momento anterior a la reflexión. Pero ambas partes nos constituyen y reflexionar es comprender quiénes somos y actuar en conciencia. Es central para Levinas, para poder actuar para el otro. Es muy importante poder ser libres y decidir para ayudar al otro, asistirlo en amor. Estar presentes. Poner nuestra razón en acción hacia la asistencia y desde la gracia divina, desde el corazón. Me gusta poder pensar y ayudar desde ahí. La posibilidad de decidir nos devuelve la dignidad. Podemos entrar en lugares oscuros y abandonarnos desde un caos que nos sobrepasa, pero también podemos rescatarnos desde el vínculo con todo otro y con todo lo otro y regresar a la luz en un orden elevado que responde para asistir al otro, a todo lo otro. El momento pre-reflexivo es muy importante también porque debemos retornar al origen y quedarnos antes de la acción para limpiarnos y actuar desde ahí sin asustarnos de ese lugar un poco suspendido en la nada. Es importante empezar desde ahí para no arrastrar fuerzas negativas anteriores y actuar y decidir desde un origen virgen.
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