La ética es el encuentro entre el infinito y lo finito donde somos testigo del otro, es la unión del mundo material y el espiritual en el comer y beber y practicar al mismo tiempo la justicia y el juicio positivo que acepta, integra y corona a todo otro en testimonio. Es un decir sin dicho del testimonio, nos dice Levinas. El decir es un aquí estoy para ti. El Otro en el Mismo es profecía en inspiración. El orden se significa en un despertar y todo se aclara. No se trata de un diálogo, el encuentro se da en una relación cercana entre dos que se vuelve testimonio del otro en integración natural. El tiempo se abre en escucha y desde el seguir la orden de estar y ser para el otro en amor, en espera y paciencia. El yo se descentra y puede atestiguar y ser para una causa que lo sobrepasa, la del otro, la de lo otro.
Soy silencio y atestiguo para el otro en amor
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