La percepción se discute como inferencia inconsciente. Pero luego tratan los investigadores de buscar lo orgánico en todo y Freud es él mismo un científico. En nosotros mucho no dominamos. Podemos también gobernar ciertas cosas y recargarnos en ello. También mucho filósofos buscan dominar sus pulsiones sexuales que a menudo ven como tiránicas. Se sabe que Freud hablaba mucho de sublimación. Y entonces, ¿cómo se combinan las energías masculinas y femeninas en acción cotidiana? Por otra parte se suma la información para no confundirnos. La potencia es vital para el desarrollo y lo que nos importa debe ser claro para nosotros, lejos del poder y sin intenciones negativas. Hay mediación, percepción y efectos. La información está en el corazón de lo social. El control de la información es objeto de concurrencia y guerra entre humanos. Debemos tratar de liberar la información e ir hacia la libertad y libre elección en todo momento. Podemos no dejarnos inquietar. Los opuestos terminan por significar lo mismo nos dice Freud y lo mismo al verse en el espejo, vemos algo extranjero. Juega entre lo familiar y lo extranjero que inquieta. Somos siempre los mismos y otros. Debemos tender hacia lo familiar que nos da confianza pero no tener temor al extranjero como doble y figura inquietante. Las figuras alrededor nuestro son buenas para nosotros, debemos pensar que así es y avanzar con fe y confianza en los acontecimientos.
El color de la vida nos espera
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