El estrés nos afecta a todos y la vida se vuelve muy compleja, demasiado, tratamos de resolvernos y de enfocarnos mejor pero las demandas se incrementan y nada entra en el cuadrante de verdadera solución. Se trata de soluciones parciales que no dan respuesta a tantos aspectos juntos. Sin embargo, tenemos momentos de gran paz y en ellos nos sentimos felices, abrazados por el universo. Las estrellas nos protegen y somos para darnos a todo otro y ayudarnos paso a paso, recuperamos el equilibrio y nos sabemos libres de nuevo, listos para completar nuevos trayectos y unirnos a los demás sin restricciones. Las restricciones retornan para ubicar nuestras limitaciones y saber que el tiempo del día tiene límite. Necesitamos entonces recuperar la calma. Somos signos en espera que entrelazan sus sentidos para proyectar un futuro mejor. El chiste es quizá proyectarlo mejor y con más claridad. Saber lo que queremos y darnos la tranquilidad que necesitamos. En los pasos firmes del universo que nos quiere libres y felices.
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