Los verdaderos peligros de la inteligencia artificial son los mundos virtuales que generan y lo que graban y publican, lo que confunden en precios y deseos. Pero como todo hay mucho de positivo al desarrollar implantes por ejemplo pero el tema es lo que pueden empoderarse de los cerebros del otro. Lo íntimo se publica y podemos transformarnos en escalos como humanos. Ayer hablaba del empoderamiento político para ser responsables de nuestras decisiones y no someternos. También puede ser que de amos generar un empoderamiento respecto a lo tecnológico y no dejarnos someter o dominar por mundos virtuales. No dejarnos llevar y aumentar los estudios para ver qué entra en información al cerebro y qué sale sin caer en el delirio. Se trata de poner límites en las reglas bioéticas porque no estamos en control de las consecuencias. Debemos regresar al control de nosotros mismos y tomar decisiones y poner límites. No podemos dejarnos manipular sin freno. El tema afectivo es una herramienta de control importante. Ir lejos es buscar lo que pasa en el tema del poder y de la toma de decisiones. Primero es importante que se comparta la manera de generar las máquinas o cómo desactivarlas. Quiénes son los especialistas y cómo nos ayudan o manipulan. Debemos permanecer independientes siempre y tomar las decisiones en nuestras manos. Todos podemos manejar nuestros aparatos y saber cómo se activan y desactivan.
En libertad elegir y actuar aún en pensamiento abstracto no dejarnos manipular por la tecnología
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