Mi experiencia con los sueños comenzó en la adolescencia
porque me desdoblé y tuve varios sueños premonitorios. Me escandalizaban porque
no sabía qué hacer con ellos y el desdoblarme en particular me dio mucho miedo.
Vi mi cuerpo y estaba fuera de él sin poder regresar a él. Entonces busqué en
yoga y meditación y en pintura y poesía, me dediqué a todo ello y me encontré
con mi proceso de teshuva y la meditación con las letras en hebreo y mis rezos
y cantos cotidianos., mi interés por los textos bíblicos y su interpretación. Se
han vuelto más fluidos y estoy tranquila. Ha sido mi solución en mi identidad,
en mi paz y dar desde ahí mi ayuda a otros. En el medio busqué de todo, el
temazcal y los líquidos de iniciación, los masajes curativos y meditaciones que
yo misma daba como terapias alternativas con el ser superior de las personas.
Ahora lo resumía en mandar luz a seres y causas en mis meditaciones cotidianas.
Un sueño muy especial lo tuve cuando comencé la maestría en Estudios judaicos.
Me soñé flotando y bailando con la Torá, vestida de manera peculiar, mis
zapatos dorados me llamaron la atención. El sueño imtenso me dejó muda por
horas, como si hubiera regresado de un estado intenso alternativo. A partir de
ahí, sin saberlo meses después me volví religiosa de manera sorpresiva guiada por
mi rabino Yerahmiel Barylka.que me sigue asesorando y escuchando, protegiendo y
desarrollando.
Se trata al final de buscar la integración fluida entre sueño
y vigilia. A la par es ayudar a otros, en meditación y a través de la
transmisión de la propia técnica de pintura y poesía que se cruzan entre sueño
y vigilia. Es tratar de hacer consciente el inconsciente. Pintas y hablas de tu
viaje de pintura, lo jalas y despiertas y te integras. Son puentes de
acercamiento. La conciencia es fluida, es lo natural, es hacer la realidad
lúcida. La parte bíblica es interesante porque se interpreta y reinterpreta y
es parte real y onírica. En el sueño la parte profunda te sacude y despierta
para enfrentar y actuar y nivelarte. Es ver y dar diferentes aproximaciones,
pero el chiste es fluir y estar en paz con los propios sueños y es camino al
inconsciente revelador. En lo bíblico también son los sueños relacionados con
la otra realidad. Son nivelaciones para equilibrarte y aprender. Freud
interpreta para revelar en un método diferente de la idea de generalizar, es
lenguaje propio y metáforas del sujeto. Para Jung es colectivo y ahí se
separan. Pero hay arquetipos que se repiten es llegar al sueño desde el sujeto
o desde lo colectivo. Es darle sentido a la vida consciente para
reinterpretarla. Es importante empoderar al paciente, la clave del sueño la
tienes tú. En José el soñador dice que el sueño es del que lo interpreta y en
ese lugar es peligroso. Los sueños son delicados para tomarlos de acuerdo con
una interpretación inadecuada o que puede afectar al soñador. La idea es
encontrar soluciones para la vida práctica y Freud nos lleva al inconsciente
que antes no se tomaba en cuenta para nada. La realidad e irrealidad fluctúan y
es importante diferenciar éstas dos e integrar. Integrar es sanar. Para
algunos, los sueños sólo son coincidencias generadas por anhelos. Otros
sintieron sintonizarse en pandemia, todos nos conectamos en un mismo dolor, en
una misma preocupación. El sueño duerme y le damos vida en la mirada del otro. Cada
parte del sueño es un personaje para la Gestalt, es herramienta de vida. Cada
cultura vive los sueños de diferente manera y quizás también hay diferencias
entre la ciudad y el campo. Las culturas de los pueblos originarios viven casi
soñando y Moctezuma decía que la vida es un sueño. El materialismo te aleja
desde el lenguaje de los sueños. Cada uno busca sus interpretaciones y sus signos.
Es darle voz a los diferentes ¨yoes¨ es importante y Freud dice que el yo es
colectivo, pero el problema a veces es que el otro nunca llega desde el yo. Son
temas de reflexión, desde el artista mucho para integrar el sueño y asistir al
otro y aceptar a las voces y guías interiores para ayudar. Neuropathway es un
camino de la persona para que se aprenda a descifrar. El discurso analítico y
el arte se entrecruzan. El camino de la neurociencia busca equilibrar la
conciencia. Es la ciencia aplicada a la vida, a los sueños, al inconsciente,
química y temperamento. Se trata de hacer el juicio a un lado para enfrentar y
ver y descifrar, acercarse a la mística y al arte. Todas estas herramientas
deben ayudarnos a vivir mejor, relajar la vida que es sueño y no enfrentarla
desde la rigidez. Volpi dice que la mente es máquina de hacer futuros. En ese
sentido el pueblo judío sería como protagónico a menudo en sus interpretaciones
al hablar de redención, es salirse del yo. Es herramienta, pero es buscar el
afuera y ayudar. Es el yo para el otro. Las relaciones son centrales y lo
individual es relativo, siempre estamos mediados. Es cierto que es importante el
para y del sueño movernos a dar, es recibir y descifrar para dar más y mejor.
Ser mujer y ser hombre también son dimensiones que nos marcan y determinan
nuestras interpretaciones y el peso que damos al sueño.
El canal de constante sueño también desprende de la realidad,
ensimisma y enajena. Hay una dimensión de los sueños ancestrales que recibimos
y nos marcan, nos determinan. Hay sueños telepáticos y premonitorios, aunque
son los menos, los sueños lúcidos también son más raros. Maimónides era quizá
el místico de los místicos, pero oculto en una razón de la sinrazón. Desde
dónde interpretas es una elección, recibir en relajación sin perseguir, desde
el ying y yang. Pedir respuestas es bueno, pero desde el agradecimiento y
ofrecer el trabajo que haremos. Debemos aclarar el camino, aclarar y entender y
abrirse a los sueños para que lleguen y sus respuestas vienen a veces en
opuestos que conocen la verdad oculta.
Interesante es utilizar todas estas herramientas y
acercamientos, como miniprofecías por descifrar y desarrollar el lenguaje de
nuestros propios sueños. Fluir y relajarnos para conectarnos y recibir. Las mujeres
somos más sensibles y podemos recibir mucho y transmitir y ayudar en todo
momento. La pluralidad nos llama a explotar su riqueza y vernos en un continuo
sueño-realidad cada vez con más fuerza, en apertura y ayuda. Es valorar la
profundidad y santidad de los sueños y revelar desde y para el otro en amor.
Interpretar desde la integración, caminos de luz para dar
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