Grace Nehmad

jueves, 21 de mayo de 2020

Mi palimpsesto


El palimpsesto en Levinas y cómo nosotros construimos nuestro propio palimpsesto

      Levinas decía que quería traducir la Biblia al griego y lo que hizo fue traer los conceptos bíblicos hacia los filosóficos. En ese tejido podemos ver capa sobre capa que nos aproxima los valores universales del judaísmo de manera laíca. Levinas mismo en este proceso es un palimpsesto, ser judío en la comunidad de Kovno en donde creció en Lituania, era como parte de su rostro físico.

      Él se comprende como talmudista, no jasídico, no cabalista, siguiendo como él mismo lo dice, los pasos del Gaon de Vilna en Lituania. Sin embargo, su formación filosófica en la fenomenología es tan fuerte y su interpretación del Talmud camina hacia ella, que a menudo se nos escapa su parte judaíca. Traduce e interpreta al Talmud en los términos de una filosofía laica y con ello desmitifica a la religión. Se opuso a la santidad en otra realidad que leyó como evasión. Su judaísmo es fuerte y sólido pero debe ser leído desde la ética.

      La importancia de su enfoque ético me sacude. Desde esta capa sobre capa con el hilo conductor de la ética se llega en última instancia a la acción al servicio del otro, al despertar al rostro que nos interpela.



Cartier-Bresson, seville, Espagne, 1953. MoMa
      Al conocer a esos niveles tan profundos el talmud, Levinas puede darse el lujo de cumplirlo entendido en otros términos mucho más elevados quizá que los de un místico pero en los márgenes concretos de  la dimensión terrenal. Para Levinas, después de la shoah el llamado es muy claro, es necesario deshacerse de la paja que lleva a la evasión para actuar al servicio del otro y evitar toda violencia.

      Lo increíble es que al mismo tiempo habla del infinito que nos abre el rostro del otro y ese deja de ser concreto, ese es Dios en una constante aplicación concreta. Entonces, Levinas no deja de tener un juego con el otro mundo ni con Dios pero su hilo conductor y aplicación cambian. Es muy importante su concepto de infinito porque nos abre a sistemas que no hemos considerado, a lo no categorizable, a lo que el instante puede traer borrando muchas estructuras anteriores ya caducas.

      Mi palimpsesto me exige muchas combinaciones, pero el chiste es pulir el hilo conductor que dé sentido y desmitifique, que rompa con estructuras caducas, que abra infinitos y me permita respirar libremente.

      Somos capa sobre capa en nuestras sociedades modernas y nos extraviamos en una bola de voces y corrientes que nos hacen perder el sentido y dirección de nuestro trabajo en esta tierra. Además, nos inclinan a la evasión y a los mitos, a fanatismos que buscan salir del bombardeo de información y exigencias. Levinas nos regresa al encuentro con el rostro y a asistirlo dando dirección existencial al caos, pero desde la apertura. Capa sobre capa para acomodarlas de tal manera que cobren un sentido claro. Mi palimpsesto se descubre y dirige en amor al rostro de todo otro, a su servicio.



Mares se abren.
Escuchan sueños. De azul
filtran su espejo.

Tes mers s’ouvrent.
Elles écoutent tes rêves
pour les remplir d’amour,
pour élever tes histoires

sur terre.


No hay comentarios:

Publicar un comentario