Grace Nehmad

miércoles, 15 de julio de 2020

Montaigne y Levinas

 

Montaigne y Levinas

Montaigne es Inventor del género ensayo, en la vida para él los trabajos son intentos solamente. Nació en 1533 y muere 1562. Vive la época de los Hugonotes y el conflicto entre nobleza y monarquía. Es hijo de una familia rica. Es de origen judío, de una familia de marranos y su papá tenía una propiedad importante. Montaigne se desarrolló en varias lenguas y decidió encerrarse para escribir.

Escribe un ensayo sobre el arrepentimiento. Busco el equilibrio sin cesar, no se puede no alterar el entorno y éste es instante de mi objeto. Pintó lo transitorio. Acomodó su historia a su realidad y pensaba: “soy accidentes de fantasía y me convierto en otro yo mismo mientras trabajo. Acojo objetos por alguna razón y me contradigo fácilmente. Si mi alma fuera pie no me ensayaría, pero estoy en constante prueba y aprendizaje”. Tiene intereses transitorios y se deja llevar a través de sendas sinuosas, divaga, pero tiene un sentido su divagar, es divagar inteligente.  Hace observaciones de lo que aparece ante nuestros ojos. Tiene pensamientos inteligentes amables y mira todo con escepticismo. Era tolerante y escéptico.  Vivía en su casa y paseaba para nutrirse de saber. No se interesaba gran cosa en lo exterior. No tenía destinos específicos y era tolerante, no era creyente pues pensaba que esos terminaban en fanatismo. Tolera y acepta y destacó en una época de los hombres luchando unos con otros y por lo que llamaban la verdadera religión. Él escribía y a veces estuvo en la corte. Era político y no lo veían con un sistema de trabajo sus colegas filósofos de la época, era enemigo del sistema. Lo tomaban como político y no como escritor y nosotros lo tomamos como escritor y no como político. Su obra es una conversación con él mismo, con los autores que cita, con uno mismo. Se trata de autores clásicos o contemporáneos de él. Era una persona especial. Hacía tentativas, conversaba, quería entender y todo era ensayo para él. Un autor actual hace un docu-viaje de sus libros, imagina a la sobrina de  Montaigne enamorada de él y fantasea sobre eso. Es interesante y creativo dejarse llevar por Montaigne. Sus ensayos son a veces largos e interesantes. No estamos obligados a leerlo todo, es libre y por secciones también para nosotros en su lectura.

        Montaigne fue así filósofo y estudió inicialmente leyes. Era jocoso y de argumentos humanistas, escépticos y liberales. Se aleja de ver la vida continua y breve. Critica nuestra soberbia, la de la razón, ciencia y religión pues para él no es absoluto el conocimiento. Quiere aprender lo útil y no olvidarse de lo mundano. Amar y odiar, no ser flojo ni falso. Busca valores verdaderos y aterrizarlos en la vida cotidiana.

        Si lo contrasto con Levinas, veo que Levinas sí tiene un sistema riguroso de trabajo y no juega para nada con un divagar. La existencia para él es una misión se ayuda, de redención, de salvación. Por más poeta y escritor que es no lo veo en ningún encierro, en cambio, comprometido con sus clases de Rashi en su sinagoga todos los sábados y con sus alumnos marroquíes de la alianza francesa israelita.

        Levinas no iba y venía en sus argumentos y después de ser prisionero en la shoah no se permitía búsquedas sin dirección ni objetivo claro. Me parece interesante rescatar las diferentes maneras de investigar y aportar luz y conocimiento al mundo.

      El conocimiento humano suma colores y saberes

                            para aprovecharlos, geología divina del saber.

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