Esta semana estuvo demandante porque cerré muchos temas que he venido trabajando por años. Me preparo así para avanzar hacia un nuevo universo para mí. Me desprendo de temas importantes que no me han dejado avanzar y camino hacia nuevas esferas de desarrollo. Es importante dejar atrás los temas que son del pasado y no enredarse en discusiones de otros momentos históricos de la propia vida. Cerrar etapas no es nada fácil. Eliminar viejas dependencias que atoran los caminos y no permiten avanzar. Nos sentimos atrapados y somos nosotros mismos los que nos encadenamos a momentos y situaciones que ya no proceden. ¿Por qué nos cuesta tanto desprendernos del pasado y avanzar? ¿Por qué nos aferramos al pasado sin ninguna justificación clara y nos hacemos daño? Desperdiciamos oportunidades de desarrollo ocupados en trampas del pasado o en lo absurdo de la existencia. Mejor sería avanzar sin miedos, reestableciendo la claridad en las relaciones y enfocándolas de manera diferente, desde el no esperar de ellas y más bien dar, nutrirlas en amor y desinterés.
desinteresadamente, sin esperar nada a cambio.
Damos por amor y por compartir.
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