Grace Nehmad

lunes, 23 de mayo de 2022

Reconocerse para darse

 Isaías 54:11

¡Oh afligida, castigada por la tempestad y no consolada! He aquí que ornamentaré tus piedras con vivos colores y echaré tus fundamentos con zafiros. Haré tus almenas de rubíes y tus puertas de carbunclos y todas las barreras que te circunden serán de piedras preciosas… Ningún arma que se forme contra ti ha de prosperar y condenarás en juicio a toda lengua que se levante contra ti. Esa es la heredad de los siervos del Eterno y su debida recompensa de Mi parte. dice el Eterno.


Sabernos protegidos y embellecidos como seres humanos, como todo ser viviente en el planeta, este concepto se extrapola del pueblo elegido a todo ser. Estar en presencia en el planeta es la protección y belleza. Es recompensa y llama la atención el cuidado necesario con la lengua, la conciencia de su poder al nivel de arma, cuidemos nuestras lenguas en todo momento y recibamos esta protección y belleza al ser, existir es ya ser elegidos para estar en el planeta.

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