Grace Nehmad

domingo, 23 de julio de 2023

En reflexión y acción

 Perashá Vaetjanán

Deuteronomio 3:23

En aquel momento imploré al Eterno, para decir: “Mi Señor Di-s, Tú has comenzado a mostrar a Tu siervo Tu grandeza y Tu mano poderosa, pues, ¿qué poder hay en los cielos o en la Tierra que pueda hacer como Tus obras y como Tus actos poderosos? Por favor, déjame pasar y ver esa buena tierra que está al otro lado del Yardén, ese buen monte y el Lebanón”. Pero el Eterno se encolerizó conmigo a causa de ustedes y no me escuchó.


Dice Rashi antes Di-s había dicho a Moshé:”Agraciaré cuando desee agraciar, y tendré misericordia cuando desee tener misericordia”.


Me parece muy claro, tenemos un camino y podemos rezar e implorar pero Hashem decide. Yo no me centraría en el castigo, quizá se lee más bien como consecuencia y algunas consecuencias sí por designio divino pueden cambiar. Pero más que nada me quedo con el mensaje de dar lo mejor de nosotros siempre y tratar de entender que ciertas cosas no son para nosotros en esta vida y que algunas son consecuencia de nuestros actos y debemos actuar en responsabilidad y restaurar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario