Isaías 5:1
Dejadme cantar a mi amigo mío el canto que hizo a su viña. Mi amigo tenía una viña en un collado muy fértil. Lo cavó, lo limpió de piedras y plantó la viña más escogida. Construyó una torre en medio de ella y también hizo ahí un lagar. Se preocupó de que la viña diera uvas pero le dio uvas salvajes. .. Por cuanto la viña del Eterno de los Ejércitos es la casa de Israel; y los hombres de Judá, la planta de Su deleite. Él esperaba la justicia, pero he aquí la violencia y rectitud, más he aquí el clamor de los oprimidos.
La mejor tierra y crecimos salvajes, no hemos logrado la integridad y el discernimiento, salir de la dispersión y amarrar sólidamente el camino del bien. Vayamos pues hacia él y rectifiquemos nuestros pasos cada día en compromiso y acción para ayudar a todo otro en amor.
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