Escritos
Proverbios 24:30
Junto al campo del haragán pasé, e igualmente, junto al viñedo del insensato, y, he aquí, que todo eran espinos, su superficie se cubrió de ortigas, y su muro de piedra estaba destruido. Esto percibí y lo coloqué en mi corazón. Vi y aprendí la lección: “Un poco de sueño, un poco de adormecimiento, y un poco de cruzar los brazos al acostarse…
Dice Rashi Del haragán, el que no repasa lo aprendido… Estaba destruido, esto es , se le olvidó lo que hubo aprendido.
En esto creo profundamente como un aprendizaje que pasa por otro lugar inconsciente y sensible en estado de reposo y olvido, se aprende de otra manera y es central para nuestra elevación espiritual cuerpo y alma.
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