Grace Nehmad

martes, 2 de febrero de 2021

Sentido que nos resignifica para el otro

 

Sentido que nos resignifica para el otro

¿Qué son las palabras?, ¿podemos salir de ellas y alcanzar la realidad? Debemos tomar un papel y ser en su palabra, pensamiento. ¿La realidad es sensorial y la palabra racional? ¿Cómo juntamos estos aspectos?

Palabra y nada, ¿hay fuera del texto? Pregunta Derrida, ¿el lenguaje es lo real o el lenguaje nos habla y nos crea?, quizás es virus que estiliza nuestros cuerpos. Usamos las palabras y no las elegimos, no podemos hablar como queremos, nos ajustamos a su gramática, y nos creemos autónomos de ellas. ¿Y a nadie le molesta que la palabra estaba ahí cuando llegamos?

Las grandes palabras no nos dan la redención quizá sí en sus sentidos e interpretaciones y es importante entonces crear a partir de ellas. Podemos apropiarnos de las palabras y vivirlas desde el centro del ser. El arte promete pues es fisura del orden rígido.

¿Quién domina y quién es dominado? Hay derrotados y vencedores y ¿por qué son necesarios bandos y redenciones?, ¿son pruebas? El lenguaje es virus y redención, esquema de reproducción y puerta de salvación, es espacio y silencio. Los vencedores crean de nuevo a sus vencidos. ¿Cómo lograr el equilibrio de estas fuerzas entre el lenguaje como un traje de buzo y el buzo que se lo pone para nadar su nado, su nada?

Nada es definitivo, se pueden lograr nuevos equilibrios prometedores. Lo real somos nosotros y debemos de funcionar en las reglas, sus leyes son nuestra palabra. Pero podemos ser capaces de guardar silencio y seguir desde nuevos parámetros e interpretaciones. Somos entonces combinación, somos creados y creamos todos los días. Nuestras palabras crean y describen, son realidad creadora y espejean una realidad. Los tiempos y dimensiones se superponen. Bajo este esquema el otro es lo que en él creo y lo que me dejo crear por él y me resignifico, pero cambia incluso este juego si mi aproximación a él es de ayuda o para recibir de él. Me parece que podemos decidir dar más que recibir e incluso recibir para dar gusto al otro. El juego está presente siempre y van cambiando sus direcciones de acuerdo con nuestra postura y aproximación a todo otro que puede ser de ayuda y escucha prioritariamente.



Crear y ser creados por las palabras para asistir a todo otro en amor

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