Hoy vamos corriendo y parece que la virtud de la paciencia se desvanece. Exploremos el tema y parece que de hecho, entre más velocidad, más necesidad de paciencia. Necesitamos están tranquilos para soportar la velocidad que nos empuja a límites insospechados. Caminamos la vida y a pesar de toda velocidad, necesitamos recuperar la fe en la paciencia. Podemos hacer mucho y es verdad que de cuando en cuando necesitamos ser impacientes porque podemos caer en conformismos injustificados. Hacer esperar es una manera de ejercer el poder sobre otros. Entonces, en esos casos es muy importante reaccionar a la espera y no dejarse dominar, una manera de ejercer los propios derechos. Paciencia es esperar la brecha entre lo que deseo de algo y obtenerlo finalmente. No siempre lo obtenemos, no siempre veremos la curación en nuestras manos. Pero hay intervalos temporales que debemos atravesar. Es importante lograr estar por encima de la espera y madurara. En realidad es posible que necesitamos más paciencia que nunca dada la presión de velocidad exterior. Lo malo es que hay presión exterior y demasiada exigencia y necesitamos sobrepasar lo insoportable. Creo que sí debemos alargar nuestros períodos de espera, más aún con la esperanza de vida en aumento. Se va transformando en un mayor reto y nos vamos a sentir golpeados pero lo importante es cómo responderemos y esperar hacerlo siendo valientes, en paciencia. Debemos enfrentar lo que nos pasa desde la paciencia, en calma. Claro que también somos humanos y a veces no reaccionar puede comprenderse como cerrados a las sensaciones e inhumanos. No sentir y no reaccionar puede tornarse un comportamiento negativo que cae en la indiferencia. Estas reflexiones más que cuestionar nuestras reacciones y decisiones nos empujan a tomar una postura y toarlas en cuenta al decidir nuestras elecciones de vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario