Mi seguridad interior busca en alma racional y alma sensible. Emerge el espíritu que busca algo más que lo racional. El recuerdo es también en presente y son equilibrios, dejarse ser y controlarse. La doctrina del átomo es roca para los epicúreos y la memoria y el recuerdo de un buen momento da fuerzas y aliento. En cuanto al dolor crónico y la muerte se pelean sus lugares y no podemos juzgar las ganas de vivir o morir. Algunos de nuestros pensamientos van al átomo y otros al vacío. De miedos vacíos que no nos conciernen. Los epicúreos piensan resolver a lo propio y buscan la ausencia de molestias desde el ejercicio cotidiano de la reflexión, desde la coofilosofía y la palabra libre. Epicuro piensa que no debemos tener miedo a los dioses. Un dios, nos dice, es como un humano en inmortalidad y en agradecimiento y virtud. Debemos buscar sus ideales y aprender a vivir cada vez mejor.
Me parecen muy importantes todos estos puntos para aprender a vivirnos mejor desde la reflexión y la búsqueda de equilibrios cuerpo y alma, tomando en cuenta todas nuestras dimensiones y la necesidad de su desarrollo.
Desde la teoría atómica me reflexiono y corrijo en desarrollo y buscando ideales y mejores equilibrios
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