Perashá Shoftim deuteronomio 16:18
Jueces y alguaciles pondrás para ti en todas las ciudades que el Eterno tu Dios asigna a tus tribus y juzgarán al pueblo con juicio justo. No torcerás el derecho, no harás acepción de personas ni admitirás regalos(sobornos), porque el soborno ciega los ojos del sabio y pervierte los juicios del justo. Sólo buscarás la justicia para que vivas y poseerás la tierra que el Eterno tu Dios te dio en heredad.
Vigilarnos en todo momento para conseguir ser justos en lo individual, para con todo otro, hacia la comunidad y como comunidad y pueblo hacia afuera. La vigilancia tienen muchas dimensiones y debemos cuidar cada una de ellas. Por otra parte no debemos distraernos con regalos, materialismos que distorsionan nuestras decisiones, materialismos mundanos que no nos permiten ver con claridad. El objetivo de la justicia debe guiar nuestro actuar en este mundo en niveles terrenales y espirituales. Ser justos trae consecuencias positivas, vida y tierra, es decir, luz, bienestar y sustento. Vigilar y ejercer camino del bien es nuestra misión existencial en el planeta.
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