Redimir a todo otro

 Rut 4:1 

Y Boaz subió al portón(de la ciudad). Se sentó allí y acertó a pasar por allí el pariente de quien había hablado Boaz y le Dijo: « ¡oh!¡Eres tú! « Ven, siéntate aquí » y se sentó. Y Boaz tomó a diez hombres de los ancianos de la ciudad y dijo: « Sentaos aquí » y se sentaron. Y le dijo a su pariente: « Noemí ha vuelto del campo de Moab y vende la parcela de Tierra que era de nuestro hermano Elimec, y yo pensaba avisarte de ello, diciendo: Adquiérela delante de los que están sentados aquí y delante de los ancianos de mi pueblo. Si quieres redimirla, redímela fuera de ti y yo estoy después de ti ». Y  él contestó: « La redimiré ». Entonces dijo Boaz: « El día que compres el campo de la mano de Noemí, también adquirirás(por mujer) a Rut, la moabita, mujer del difunto para perpetuar el nombre del difunto sobre su herencia »…A la sazón, ésta era la costumbre en Israel en lo concerniente a redenciones, cambios y confirmaciones de negocios: un hombre se quitaba el calzado y lo daba al otro y esto servía de testimonio en Israel.

Redimir, tomar nuestras costumbres y conexión con la tierra y la familia. Comprar a una mujer, ¡qué bueno que ya no lo hacemos!, pero todo este acto de rescate es precioso, tomar a una mujer que quedó sola y decidió formar parte de nuestro pueblo siguiendo a su suegra, el otro y su cuidado al centro. Me parece que estamos aquí para redimir a todo otro en todo momento siguiendo nuestras costumbres.