Bourdieu y Levinas,
Este autor nos habla de campos sociales que se
luchan a través de la inteligencia, pero se siente el racismo. Él comprendió u
analizó a la cultura para separar a las clases sociales con sus normas y peculiaridades.
Aproxima a las ciencias humanas para explicar la condición humana. Es un
análisis muy rico el que realiza y su escritura se vuelve más accesible al
final de su vida. Vive entre 1930 y 2002.
Se recarga en Durkheim, Marx y Weber para llegar a sus propios matices y
conceptos en su análisis social.
Es muy interesante
su teoría de los campos sociales en la cual un campo es un espacio de juego y
estrategia en la que se establecen relaciones entre participantes con conflicto
y lucha. Los participantes son agentes que luchan por obtener el capital
simbólico que es lo que da legitimidad, prestigio y autoridad y por eso lo
quieren. Ellos pueden luchar, crear y participar, no son sujetos estáticos,
maniobran y la orientación de lucha se entiende como un capital simbólico. Este
capital se da en varios campos con sus instituciones y reglas específicas. Los
campos son laborales, económicos, educativos, entre otros. Tiene cada agente un
puntaje por las características que posee. Así, cada uno con la suma de sus
características lucha mediante estrategias y alianzas para obtener capital
simbólico que da legitimidad, autoridad y prestigio.
Este autor nos brinda un análisis profundo de
nuestras maneras de interactuar. Para Lévinas estas luchas no tienen sentido,
se trata de luchar por asistir al otro de la mejor manera y en cambio, esta
teoría es competitiva y de dominación. En la práctica, me suena muy realista y parece
que los agentes buscan constantemente maneras de sobresalir y de oprimir al
compañero, es lamentable. Sería muy diferente si el esfuerzo fuera conjunto y
la lucha por un bien común con la sola intención de ayudar más, buscar estrategias
creativas para asistir al otro u otros y no para superarlo, dominarlo y ponerlo
de lado.
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