La vida avanza y muchos parten, otros se quedan, persisten y se canectan. Los grandes clásicos de la filosofía me sostienen y acompañan, mis estudios de Torá, mis actividades creativas y también todo mi quehacer cotidiano. Ciertamente no esperaba para nada esta historia de vida. Se salió mucho de los caminos comunitarios y estoy firmemente dentro de mi familia y comunidad pero soy muy diferente también. Me atrae la gente en general y la en particular la solitaria a la que le gusta estudiar y crear como a mí. Me despierto y recibo al amanecer con gran placer y después, qué traerá la vida no lo sé y me abro a sus noticias y regalos. Lo que sí veo es que fuera ya la paciencia por la nena creativa, diferente y estudiosa se agota. Yo me voy sintiendo más libre y feliz y alrededor me ven un poco más raro cada vez. Espero logren aceptarme y pueda continuar mi trabajo luminoso en paz para ayudar a todo otro, dar mi contribución al mundo y que perciban y comprendan la luz que les traigo. A seguirle en amor.
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