A veces pasamos información a través de cuentos que encarnan culturas y filosofías de vida. En las comunidades se vive en cuento o el cuento nos ayuda a vivir pero se revela mucha información dentro. Los relatos de vidas y personajes nos hablan de nosotros. Nos vemos reflejados y logramos aceptarnos, abrirnos, levantar las rígidas etiquetas existenciales. La literatura nos ayuda a entrar en universos desconocidos que nos son familiares. Circulamos libremente entre líneas que sugieren y nos asisten de diferentes maneras. Mucho se puede decir sin decir, podemos avanzar desde el corazón de quienes somos y liberar las mentiras de este mundo y la falta de ética. Los libros persisten y transmiten y viven más allá de nosotros. El chiste es penetras los textos y actualizar su pensamiento. El texto bíblico por ejemplo, debe leerse y reinterpretarse, actualizarse y captar su luz desde la escucha profunda de sus letras. El chiste me parece, es abordarlo todo desde el asombro y el discernimiento, en escucha y aprendizaje humilde.
Transmisión generacional que guardan los libros y el arte para nosotros en diferentes lecturas
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