Salmo 35
Para quien le surgieron adversarios:
De David contiende oh Di-os
A mis contendientes; combate. Toma el escudo y la armadura y levántate a mi auxilio. Y desenvaina la lanza, y haz cerrar( bloquea) el encuentro de mis perseguidores; di a mi alma: “tu salvación Yo soy”
Que se avergüencen y se abochornen los que buscan mi alma; que retrocedan frustrados los que planean mi mal, que sean paja ante el viento y un ángel de Dios los aleje.
Me parece que podemos también pedir por su bien, pues si nos buscan es por algo y di están recargados en su lado negativo, necesitan luz y nuestra ayuda y podemos dárselas y ayudarlos a recuperar su centro. Podemos creer en la bondad de todo ser humano y encontrar la manera de ayudar a todo el que nos busca.
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