Una teoría de los sueños trata de explicar lo
inexplicable, los sueños son grotescos. Nos impresiona lo absurdo, lo más malo es
cuando lo absurdo está en la dimensión terrenal, pero ese es otro tema.
Hay cuatro tipos de sueños según Freud. Freud
dice que llevamos el imaginario dentro.
Tenemos en primer término el sueño despierto es
el de las historietas que se cuentan y son contadas para satisfacer deseos
frustrados en la realidad. Se trata de sueños de dinero como ganarse la
lotería. Sueños de amor. Sueños de éxito social. Somos campeones en diferentes
planos. Sueños de venganza. Historias que reparan las historias reales de vida.
Todos los tenemos. Nos daría pena aceptarlos, nos contamos historias para no frustrarnos.
Su función es la de realizar el deseo y es imaginario como calmante. Los
estímulos son múltiples. Tenemos después tres tipos de sueños dormidos: infantiles,
racionalizados y pesadillas.
En los sueños infantiles es el sobre yo quien juega
con todo, sin barreras morales. No hay censura que deforma. El deseo está
autorizado. Tengo hambre y sueño un pastel. El segundo es deforme, es
contradictorio por la prohibición que se quiere esconder y mostrar a la vez. El
deseo se logra, pero a través de extraños caminos. Elaborar sueños y
racionalizarnos es de un yo que descubre la historia deformándola. Observa deseos
prohibidos y deforma para ser aceptado.
Finalmente, en la pesadilla este efecto no se
logra y el yo despierta escandalizado.
Racionalizamos en los sueños para explicar los
sueños prohibidos que afloran. Es un imaginario encriptado por revelar.
Me gusta pensar en todos estos sueños porque en
realidad como artistas los límites entre sueño y realidad tendemos a borrarlos
para priorizar la creatividad. Entonces, tendemos a explicar la propia vida de
estas cuatro maneras. En especial, a través de las letras que hilan y ordenan
el resto de los elementos circundantes. Así, la vida en general se convierte en
un sueño despierto y el centro existencial es leerse en diferentes historietas paras
compartir la vida con todo otro nos diría Levinas y ponerlo al centro de
nuestra ayuda en amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario