Prostituirse parece imposible y está siempre cerca de toda acción y decisión. Solemos auto engañarnos, convencernos, justificarnos. La tendencia natural humana a la pereza nos arrastra y dejamos el verdadero trabajo por las justificaciones exteriores. Es una tendencia negativamente arraigada en nuestras tendencias humanas y las plagas nos atacan como consecuencia. Después no queremos aceptar su razón de ser. Que tengamos luz y fuerza para ver y actuar correctamente, para desarraigar estas negatividades que provocan toda pandemia en el sentido smplio de la palabra.
Desde el pavo real con dis ojos, uno en el corazón, logramos erradicar toda plaga
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